REFLEXIÓN
Yo había olvidado lo que era el amor.
Su rostro triste me hirió como el filo de un cuchillo.
Aquella mirada húmeda suya, cayendo en perlas
saladas, borró mis dudas.
Me arrodillé y le pedí perdón.
FIN
Su rostro triste me hirió como el filo de un cuchillo.
Aquella mirada húmeda suya, cayendo en perlas
saladas, borró mis dudas.
Me arrodillé y le pedí perdón.
FIN